Este vídeo muestra una serie de dibujos realizados por niños y niñas a partir de la imagen inicial de un niño llorando. Detrás de cada trazo, hay una historia y surgen representaciones muy diversas: algunas reflejan escenas de protección, afecto y vínculos sanos; otras, en cambio, revelan experiencias de miedo, soledad o situaciones de maltrato. Estos dibujos no son sólo expresiones artísticas, sino ventanas al mundo emocional de la infancia. Nos permiten detectar señales de bienestar o de sufrimiento que, en muchos casos, no logran expresarse con palabras. Son también una invitación a mirar con más atención, a escuchar con sensibilidad y a actuar con responsabilidad.
Garantizar entornos seguros, afectivos y respetuosos es un derecho de la infancia y una tarea colectiva. Los niños y niñas necesitan adultos presentes, instituciones comprometidas y una sociedad que no ignore sus señales. Escuchemos lo que estos trazos nos quieren decir. Porque detrás de cada dibujo hay una vida que necesita cuidado y proteger a la infancia es proteger el futuro.